LOS COMUNISTAS ANDALUCES AFRONTAN LA SEGUNDA FASE DE SU CONGRESO INMERSOS EN UNA PROFUNDA CRISIS

MALGA
SERVIMEDIA

El Partido Comunista de Andalucía (PCA), la organización más fuerte y consolidada de cuantas conforman el Partido Comunista de España (PCE), se encuentra dividida y sumida en una profunda crisis ante la fase final del V Congreso, que se celebrará este próximo fin de semana en Fuengirola (Málaga).

El proceso de divergencia interna surgido en el PCE como consecuencia de la caída del bloque comunista del Este de Europa ha afectado también a la organización andaluza, que hasta hac pocos meses cerraba filas y defendía el mantenimiento del partido como principal integrante de Izquierda Unida.

Sin embargo, las voces que en un primer momento parecían minoritarias y que coincidían con las de los independientes de Izquierda Unida, parecen estar calando hondo entre la militancia del PCA, a pesar del claro mensaje aprobado en el XII Congreso del PCE.

En la primera fase del V Congreso de los comunistas andaluces, los delegados aprobaron por amplia mayoría elevar una propuesta a laIII Asamblea Federal de Izquierda Unida, por la que esta organización se convertía en una federación de partidos con capacidad jurídica propia. Esta premisa aseguraba desde Andalucía la supervivencia del PCE.

No obstante, las voces discrepantes al mantenimiento de las actuales estructuras, que no asistieron al Congreso del PCA, parecen haber convencido a parte de la militancia y cuadros intermedios de la formación.

El propio presidente de Izquierda Unida-Convocatoria por Andalucía, Luis Carlos Reón, llegó a manifestar recientemente que los comunistas cada vez son menos en el seno de la coalición.

Felipe Alcaraz, actual secretario general del PCA y una de las piezas básicas en la organización comunista andaluza para lograr la integración de estructuras sin la desaparición de las mismas, ha resultado ser el más dañado por las discrepancias sobre lo que debe y puede ser el Partido Comunista de Andalucía.

Alcaraz, figura indiscutible de los comunistas andaluces, ha anunciado que no se presenará a la reelección al frente de la Secretaría General, después de que varios dirigentes solicitaran su abandono de la nave.

Pese a ello, el todavía secretario general intentó buscar un sustituto de su mismo corte ideológico y organizativo, aunque no ha recibido ninguna respuesta positiva.

El diputado Antonio Romero y el parlamentario andaluz Rafael Rodríguez, ambos de la provincia de Málaga, así como Juan Vicente Acuña, de Cádiz, rechazaron la invitación de Felipe Alcaraz para encabezar la candiatura oficial al V Congreso, si bien los tres coinciden en señalar la importancia de la supervivencia de la organización.

Pese a los intentos de Alcaraz de no provocar la presentación de una lista alternativa compuesta por militantes partidarios de la renovación de las actuales estructuras, la ruptura parece casi segura.

Aunque la mayoría de las fuentes consultadas por Servimedia sobre el desarrollo del proceso congresual confirman que la mayoría está por las propuestas continuistas marcadas en e XII Congreso del Partido Comunista de España, los acontecimientos de las últimas semanas apuntan a que la unidad de la organización más fuerte del PCE y que mayor número de delegados aporta a la III Asamblea Federal de IU está a punto de resquebrajarse.

(SERVIMEDIA)
18 Mar 1992
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