Entre las propuestas de dicho plan, están las de duplicar la energía procedente de fuentes renovables, reducir un 10% el consumo energético a través de medidas de ahorro y eficiencia energética, mejorar la fiabilidad del suministro eléctrico, y ampliar las infraestructuras y reducir un 10% la emisión anual de CO2 energético.

El Plan Energético ha sido elaborado por expertos de la Universidad Politécnica de Madrid y hoy fue presentado al consejero de Economía e Innovación Tecnológica de la Comunidad de Madrid, Fernando Merry del Val.

El consejero señaló, durante la presentación del plan, que el documento sigue abierto a nuevas sugerencias de los expertos. El texto se suma a las múltiples iniciativas puestas en marcha por la Comunidad de Madrid en materia energética y que forma parte del compromiso del Gobierno regional de garantizar, a través de un proyecto global, la seguridad y el suministro en la región.

"La Comunidad ha experimentado un desarrollo demográfico, económico y energético muy señalado en estos últimos años, y su proyección hacia el futuro hace previsible que los próximos años se necesitará un suministro creciente de productos energéticos", señala la propuesta elaborada por técnicos de la Politécnica.

El objetivo principal del plan es la satisfacción de la demanda energética que se experimentará en la Comunidad de Madrid a lo largo de los años contemplados en la planificación, que abarca hasta 2012, a través del aprovisionamiento de los productos energéticos demandados (derivados del petróleo, gas natural y electricidad) y de la mejora de las infraestructuras para su generación, transporte y almacenamiento, además de los servicios de distribución.

DEMANDA DE ENERGIA

Con este objeto, el plan incluye un balance energético de la Comunidad de Madrid en el que se refleja claramente la estructura de la demanda actual, tanto por sectores como por productos energéticos, así como una estimación de la demanda futura a lo largo del horizonte temporal del plan.

En dicho balance se señala que el consumo total de energía de la Comunidad de Madrid en el año 2003 fue de 10.217 ktep y que los sectores con un mayor consumo de energía final son el Transporte (un 51%), seguido del sector Doméstico (24,5%) y del sector Industria (12%).

En cuanto a la fuente energética final consumida, los derivados del petróleo suponen un 62% del consumo, la electricidad un 21%, el gas natural un 15% y el resto de fuentes casi un 2%.

Según las previsiones de la UPM, salvo que se adopten medidas adecuadas, esta demanda tenderá a crecer en el futuro hasta alcanzar los 13,6 Mtep.

Por otra parte, las infraestructuras energéticas de generación, transporte y almacenamiento son también analizadas en profundidad en el documento, en el que se recoge un examen exhaustivo de las actualmente existentes y se señalan aquellos aspectos que se considera necesario reforzar e impulsar durante el periodo analizado.

Así, entre otras, se proponen las soluciones consideradas como técnicamente más viables, eficientes y limpias para resolver problemas como el del desequilibrio generación/consumo de electricidad que existe actualmente en la región, donde apenas se produce un 5,2% de la energía eléctrica final consumida y cuyo déficit debe paliarse importando el 94,8% restante del resto del territorio nacional a través de una amplia red que transporta esta energía desde sus puntos de generación.

Se resalta el caso del consumo de energía eléctrica por ser especialmente relevante (en el año 2003 se consumieron 25.070 GWh), ya que desde el año 1997 su crecimiento medio anual ha alcanzado el 5,6% y ha llevado aparejado un incremento muy importante de las máximas potencias demandadas.

Dichas puntas, que se producían tradicionalmente en invierno, pero que en los últimos años han ido creciendo extraordinariamente en verano, debido al uso del aire acondicionado, llegaron a alcanzar en la Comunidad de Madrid los 4,89 y 4,86 GW en el invierno del 2003-2004 y en el verano de 2004, respectivamente.

No obstante, el Plan no se limita a estudiar la previsión de la demanda energética futura y las infraestructuras necesarias para cubrirla, sino que propone acciones concretas para contribuir a reducirla.

Con este objeto, prevé la puesta en marcha de un Plan Integral de Ahorro y Eficiencia Energética, basado en el aprovechamiento energético, con el fin de gastar menos y mejor (ahorro + eficiencia) y con el que se prevé alcanzar en el año 2012 una disminución del 10% de la demanda energética respecto de la tendencia del consumo, pasando de 13,6 a 12,26 Mtep (millones de toneladas equivalentes de petróleo).

RENOVABLES

En cuanto a las energías renovables, el Plan da prioridad a fuentes energéticas como la biomasa, la eólica, los residuos sólidos, la solar fotovoltáica y la solar térmica, y prevé duplicar en 2012 la energía anual producida mediante estas fuentes con actuaciones específicas para su desarrollo, entre las que sugiere establecer líneas de ayudas para estudios de viabilidad y para la promoción de tecnología y la I+D que la sustente, así como subvencionar ciertos tipos de instalaciones.

Todas las actuaciones que propone el plan conducen, además, a disminuir las emisiones de CO2. De este modo, está prevista una reducción del 10% en la emisión anual de CO2 energético al final del Plan sobre la tendencia prevista estimada para este periodo.