El estudio Limnopolar pretende demostrar la importancia de los lagos de alta montaña como sensores de los cambios ambientales e indicadores de la salud del ecosistema. Para ello, el grupo de científicos realizará hasta el 20 de febrero una campaña de muestreo en los humedales de la Península de Byers, en la isla Livingston de la Antártida,

La expedición partió de Madrid el pasado miércoles y alcanzará las tierras árticas el 22 de enero. Los procesos que ocurren en las zonas polares tienen una repercusión en todo el planeta que hacen indispensable su investigación.

Los ciudadanos podrán seguir el día a día de la expedición a la Antártida a través de las páginas web www.parquenaturalpenalara.org y www.apispain.es, donde podrán encontrar un blog con imágenes del proyecto.