En una charla con jóvenes socialistas en la escuela de verano del PSOE, y al ser preguntado por uno de los asistentes sobre las actuales demandas ciudadanas y el descrédito de la vida pública, el líder socialista se comprometió a innovar los métodos de hacer política con ejemplos "muy concretos que pondremos en marcha desde el Gobierno".

Subrayó que en muchas ocasiones los ciudadanos perciben "una neblina y a veces una bruma" entre ellos y la actividad política, que les impide conocer co claridad lo que hacen sus representantes y cómo lo hacen. Abogó por ello por un derecho reconocido y respetado de la sociedad a una información plena de los poderes públicos.

Todo lo que emane de la actividad pública, excepto los secretos de Estado, "que no son muchos", deben ser conocidos por los ciudadanos, sentenció Zapatero. "Es vital, por ejemplo", dijo, "que las comisiones de Urbanismo sean grabadas y públicas" o que los habitantes de un municipio puedan saber en cualquier momento lo que gasta ada una de las consejerías de su municipio y en qué.

El eje de su discurso fue la reafirmación en los valores de izquierda y la insistente intención de "ensanchar" los espacios de participación ciudadana en la vida política para construir un país y también un mundo más justo y solidario a través de cauces manejados y controlados por los propios ciudadanos.

Rodríguez Zapatero dijo en este contexto que se propone emprender un cambio "de verdad, no cosmético" en los modos de hacer política en España para "dar vida y salud a la democracia" y garantizar que los recursos públicos se destinan a quienes más lo necesitan y también en la representación de España en el mundo.