COMUNIDAD MADRID. TERESA SAEZ DICE QUE LA ESPANTADA FUE "UN TOQUE DE ATENCION A SIMANCAS" POR LA QUE ESPERABA SOLO UNA MULTA

MADRID
SERVIMEDIA

Teresa Sáez aseguró esta tarde ante la comisión de investigación de la Asamblea de Madrid que su ausencia del día 10 de junio fue sólo "un tque de atención" a Rafael Simancas por el que esperaba "una multa o un expediente disciplinario", pero no la expulsión del PSOE y los calificativos que recibió, con los que los socialistas, dijo, se cerraron su propia puerta en la sesión de investidura.

Después de un prolongado silencio desde el día 10 de junio interrumpido sólo con alguna entrevista, Teresa Sáez compareció ante la comisión de investigación basando todas sus respuestas en notas que su abogado, el mismo que asiste a Eduardo Tamayo, Jess Miana, le escribía y le pasaba continuamente.

En respuesta a las preguntas del portavoz de Izquierda Unida, Luis Suárez, Teresa Sáez aseguró que su ausencia era "un toque de atención" a Simancas para que corrigiera su acuerdo de Gobierno con Izquierda Unida. "Lo más que me esperaba es que por esa ausencia nos hubieran puesto una multa o habernos hecho un expediente disciplinario, no creía que se les iba a calentar la boca tanto y decir las cosas que dijeron".

De hecho, aseguró que tenían pensad respaldar la investidura de Rafael Simancas como Presidente de la Comunidad si corregía ese acuerdo "porque no queremos un gobierno de derechas, no queremos al PP gobernando", explicó, "pero como a los cinco minutos éramos unos traidores, unos tránsfugas, unos indeseables y unos deshechos humanos...".

Esa reacción provocó, según el relato de Teresa Sáez, que la dirección socialista "no pudiera echarse atrás" y que Tamayo y ella decidieran no respaldar a Simancas puesto que todas las referencias del cndidato a ellos eran descalificaciones.

Comenzó asegurando que no tiene nada que ocultar y secundando la tesis de Tamayo de que la espantada se debió a los acuerdos con Izquierda Unida, "que no daban lugar a dejarnos nada" y que, por tanto, incumplía pactos internos. La trama, dijo, "sólo existe en la mente del señor Simancas".

Dejó muy claro también que tomó sus propias decisiones sin ser obligada por nadie. Según su relato, el día 10 de junio por la mañana, después de la reunión del Grupo Sociaista, se dirigió al salón de plenos para esperar a que Eduardo Tamayo le contara el resultado de la reunión que esperaba mantener con el secretario de Organización de la Federación Socialista Madrileña (FSM), Antonio Romero, para solventar sus discrepancias.

Poco antes de las diez de la mañana, prosiguió, Tamayo le dijo que Romero no se había presentado. "Nos dejan como siempre. Tú verás lo que haces, pero yo me voy porque no aguanto más", le dijo su compañero. "Decidí seguir al señor Tamayo y me fui on él. No estaba previsto, surgió en el momento", añadió.

Esta fue la versión defendida también por Tamayo en su primera comparecencia, el pasado jueves. Sin embargo, apenas unas horas antes de la comparecencia de Sáez, Tamayo reconoció que el día antes de su espantada había pedido una habitación de hotel con una estancia amplia para poder atender a los periodistas el día 10 por la tarde.

Más adelante, Sáez aseguró que no tiene "nada que ver" con José Esteban Verdes ni con ninguna de las otras pesonas con las que se ha relacionado a su compañero porque, a pesar de que "me atengo a lo que me dice mi portavoz y me creo todo lo que me dice", desconoce el círculo de amistades de Tamayo y sus relaciones derivadas de su actividad como abogado "y a mí no me contaba con quien hablaba".

(SERVIMEDIA)
28 Jul 2003
CLC