La consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, visitó este viernes este dispositivo, donde resaltó “el gran trabajo de sus profesionales” y el compromiso del Gobierno regional “con quienes más lo necesitan, ofreciéndoles, a ellos y sus familias, los recursos que precisan para su mayor bienestar”.

En concreto, la residencia dispone de 18 plazas, cuyos usuarios son completamente dependientes, con una discapacidad media del 90%. Les atienden un equipo multidisciplinar formado por auxiliares, terapeutas ocupacionales, logopedas, educadores sociales, enfermeras y fisioterapeutas, entre otros.

Por su parte, el centro de día tiene 15 plazas, en el que gran parte de sus usuarios se han integrado una vez han terminado los estudios en su centro de Educación Especial.