En total, en el pasado año se registraron 1.171.446 contratos que exigieron al trabajador tener que cambiar su lugar de residencia a otra comunidad.

Los principales flujos de trabajadores que llegan a Madrid proceden de Castilla-La Mancha (22,5%), Andalucía (18,2%), Castilla y León (10,9%), Cataluña (10,5%) y de la Comunidad Valenciana (8,0%). Por provincias, destaca Toledo (10,0%), seguida de Barcelona (8,8%), Ciudad Real (5,5%), Valencia (5,3%), Guadalajara (5,1%) y Sevilla (4,9%).

En cuanto al desplazamiento efectuado por los trabajadores madrileños a otras comunidades autónomas, los principales lugares elegidos para trabajar son Castilla-La Mancha (31,1%), Cataluña (17,5%), Andalucía (11,3%) y Comunidad Valenciana (9,3%). Por provincias, la principal es Barcelona (13,0%), seguida de las provincias limítrofes con Madrid, Toledo (8,2%) y Guadalajara (5,3%).

La movilidad se produce más entre los hombres que entre las mujeres (59%). Además, la mayoría son menores de 30 años (56,2%).

Asimismo, el informe señala que son tres las principales actividades económicas que mueven a los trabajadores a trasladarse a Madrid. En primer lugar, las actividades de servicios a las empresas que captan a uno de cada tres contratos; en segundo lugar, la construcción (19,5%) y en tercer lugar el comercio (10,6%).

Sin embargo, entre las actividades que impulsan a los trabajadores residentes en Madrid a desplazarse a otra comunidad, se encuentran la construcción, en primer lugar (19,2%), seguido de las contrataciones realizadas por empresas de trabajo temporal (14,6%) y los servicios a las empresas (14,4%).

Los empleos que atraen más mano de obra a Madrid se concentran en cinco ocupaciones: dos de ellas están directamente relacionadas con la construcción (peones de la construcción, un 16,0%, y trabajadores cualificados de la construcción, un 12,6%), otras dos corresponden a ocupaciones propias de los servicios a las empresas (empleados de tipo administrativo, un 16,2% y técnicos y profesionales de apoyo, un 13,1%), y otra ligada al comercio (dependientes de comercio, un 10,1%).