"No estoy hablando de dar una mayor importancia o un trato sanitario distinto a las mujeres, sino de reconocer que existen diferencias", matizó Prado en la clausura de un foro sobre la salud de la mujer, celebrado hoy en el Instituto Europeo de Salud y Bienestar Social, Centro Colaborador de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El género, dijo, es un factor que introduce una cierta variabilidad en los patrones de riesgo y que puede dar lugar a desigualdades en salud, y a situaciones de inequidad en el acceso y en la utilizaciónde los servicios sanitarios.

De ahí, continuó, "la necesidad de integrar la perspectiva de género en la producción del conocimiento biomédico y en la planificación y ejecución de las políticas sanitarias, de los programas y las acciones de salud".

"No puede ser de otro modo. Si queremos que nuestro Sistema Sanitario garantice la igualdad de resultados en salud, sin discriminación de género ni de sexo, su organización y su oferta de servicios debe sustentarse en la comprensión y la respuesta a las diferencias biológicas e incluso sociales entre hombres y mujeres", agregó la viceconsejera madrileña.

Por su parte, el consejero de Sanidad de la Junta de Castilla-La Mancha, Roberto Sabrido, que también participó en este encuentro, corroboró la desigualdad existente entre hombres y mujeres, también en el ámbito sanitario.

Sabrido hizo hincapié en que la mujer vive más que el hombre, si bien goza de peor salud, por lo que es necesario mejorar su calidad de vida, desarrollando políticas de salud por género.

Por último, la vicepresidenta del Gobierno de Canarias y consejera de Sanidad, María del Mar Julios, mostró su preocupación por la gran diferencia que existe en la accesibilidada los servicios sanitarios por parte de un hombre y de una mujer.

Así, indicó, las mujeres acuden más veces al médico que los varones por tratamientos sintomáticos y se automedican más. Sin embargo, el hombre, cuando acude, la mayoría de las veces es hospitalizado, declaró.