Dos de las empresas que ofrecen este servicio en el país vecino son Back and Safe en Paris, e Izydrive en Rennes, que se encargan de medir los niveles de alcoholemia de los empleados tras uno de estos eventos, y en caso de que superen el máximo permitido, facilitarles un conductor que les llevará a casa en su propio coche.

Estos chóferes llevan motocicletas plegables que caben en el maletero de un coche, lo que les permite regresar con rapidez al lugar donde se celebra el acto para proseguir con su trabajo.

Firmas como Coca-Cola, la emisora de radio RMC, Canal+ o la filial de inversión del banco Natixis ya han adoptado esta medida, con el fin de reducir la mortalidad en accidentes de tráfico de sus trabajadores, y evitar que pierdan puntos y el carnet de conducir si superan el nivel de alcoholemia en un control de carretera. "Las empresas no sólo tienen una responsabilidad económica con respecto a sus trabajadores, sino también social y ética. Aunque algunas no parecen tener esta madurez todavía y rechazan adoptar medidas para abordar el problema del consumo de alcohol entre sus trabajadores", destaca Florence Villette, responsable de comunicación de Canal + en Francia.