Esta resolución, en la que se incluyen medidas laborales que han afectado ya a 900 trabajadores, se basa en el incumplimiento por parte de la empresa del laudo arbitral dictado en 1993 para garantizar la continuidad de la factoría, que fue aceptado por trabajadores y dirección.

Tras jubilar anticipadamente a 544 trabajadores mayores de 50 años y otros 148 empleados hayan solicitado la baja incentivada de la empresa, este mediodía se comunicó a otros 208 mpleados que a partir de mañana estarán sujetos a un expediente de regulación de empleo de un año de duración, que finalizará el 31 de mayo de 1995.

Durante este periodo, los trabajadores recibirán el 97,5 por ciento de su salario neto, del que el 60 por ciento lo pagará el Instituto Nacional de Empleo, y el resto lo aportará la empresa Santana.

El comité de empresa espera conseguir que este expediente no tenga que ser soportado por los mismos 208 trabajadores, sino que lo que queda de plantilla ueda rotarse en cuatro turnos de tres meses o en dos de seis.

Al estar impuesto por la propia Dirección General de Trabajo en la resolución dictada, el expediente de regulación de empleo entrará en vigor de forma inmediata y mañana 208 trabajadores no se incorporarán a la factoría.