Mientras que los comisionados de IU y PP, Antonio Romero y Rogelio Baón, respectivamente, aseguraron que del testimonio de Carlos de la Torre se desprende que Roldán y Serra mantuvieron unas relaciones periódicas y fluidas, el portavoz socialista en la comisión, Alvaro Cuesta, negó la veracidad de estas afirmaciones.

Cuesta calificó de "radicalmente falso" que el compareciente hablara ante los diputados de una relación frecuente y fluida entre el ex director de la Benemérita y e vicepresidente del Ejecutivo.

El diputado del PSOE acusó a Romero y Baón, aunque sin citar sus nombres expresamente, de "ampararse en el secreto de la comisión para transmitir una idea falsa y algo que no ocurrió".

Cuesta emplazó a los periodistas a conocer las cintas magnetofónicas de las sesiones, "para acreditar cómo dos comisionados han falseado la realidad de una comparecencia. El propio compareciente les podrá aclarar los extremos de sus afirmaciones".

Por su parte, Romero y Baón se rafirmaron en sus manifestaciones y señalaron que el origen del conflicto radica en la protección que el Grupo Socialista quiere ofrecer al vicepresidente del Gobierno, actitud que, a su juicio, le lleva a negar la evidencia.

"Aquí hay una desesperada actitud de salvar las relaciones del vicepresidente del Gobierno con el señor Roldán y al final van a decir que no lo conocía, que nunca habló por teléfono con él y que no dirigía nada desde la vicepresidencia del Gobierno", puntualizó Romero.

El diptado de IU se mostró tajante al afirmar que incluso hubo un periodo en el que Serra "puenteó" a José Luis Corcuera y a Rafael Vera, que en su opinión estaban adscritos al sector guerrista, lo que contrastó con las relaciones directas que Serra mantuvo con Roldán, ligado al sector renovador de Navarra.