En su opinión, hubiera sido más beneficioso para los trabajos de la comisión que las comparecencias hubieran arrancado con Francisco Alvarez, Miguel Planchuelo, el coronel Juan Alberto Perote, o incluso José Amedo, para, a partir de sus testimonios, extraer las consecuencias políticas derivadas de la trama de los GAL.

Martínez Sevilla lamentó que los inculpados en e "caso GAL", "que son aquellas personas que tenían actuaciones directas en esta trama", vayan a comparecer precisamente después de que por la comisión hayan desfilado los cargos políticos.

"El de las comparecencias", apostilló, "ha sido un orden invertido y sin sentido, en el que estaban muy interesados CiU y PNV, que pusieron un énfasis absoluto en que las comparecencias de Alvarez, Planchuelo y Perote fueran las últimas, con la excusa de que ya tenían suamarios judiciales en marcha".

El portavo del Grupo Mixto admitió que el orden fijado definitivamente para las comparecencias no fue "el más lógico", aunque señaló que su grupo tuvo que votarlo para llegar a "unos mínimos" que posibilitaran el inicio de los trabajos.

"Desde nuestro punto de vista", aclaró, "las responsabilidades políticas deben ser demandadas a la vista de las actuaciones concretas y por eso había que haber colocado antes las comparecencias de los encusados en el 'caso GAL'".