Las medidas, que parten de la política de igualdad de la UE, supondrán la incorporación del acoso sexual dentro de la legislación comuitaria como una forma de discriminación.

De acuerdo con la comisaria de Asuntos Sociales, Anna Diamantopoulou, del 40% al 50% de las mujeres trabajadoras han recibido una propuesta sexual no deseada.

El cambio legislativo se notará sobre todo en países como Grecia y Portugal, donde no existen leyes que protejan contra el acoso.