Según la oficina estadística de la CE, la pirámide de las edades en Europa está invirtiéndose. El desmoronamiento de la natalidad y la mayor duración de la esperanza de vida son los factores que explican que la Comunidad Europea cuente actualmente con unos cien millones de personas de edad avanzada.

Otros objetivos del plan aprobado por la Comisión Europea son identificar estrategias entre los países miembros y alentar la solidaridad entre las generaciones.

Como primer paso, la Comisión realizaá los estudios necesarios para conocer con detalle los problemas económicos que plantea el envejecimiento de la población europea y evaluar sus costes sociales y la incidencia sobre el mercado laboral.

También analizará los problemas prácticos a los que se enfrentarán las personas de la tercera edad en su vida cotidiana: alojamiento, transporte, turismo, cuidados médicos a domicilio, etc.

La Comisión Europea tiene también previsto hacer un seguimiento durante este año y el siguiente de las accions emprendidas en cada Estado miembro para estrechar la solidaridad entre las generaciones y crear nuevos servicios dirigidos a las personas de edad avanzada.