Durante estas jornadas, que se prolongarán hasta el 21 de diciembre, se llevarán a cabo acciones en pro de la diversidad, en las que, por primera vez, se van a implicar todas las instituciones del fútbol y fútbol sala español: federaciones, Consejo Superior de Deportes, gran parte de los clubes de fútbol de Primera División, jugadores, aficionados y organizaciones comunitarias.

El objetivo de la campaña es utilizar el "poder del fútbol" para combatir el racismo, aprovechando el hecho de que los equipos cuenta con futbolistas de diferentes razas y de muy diversas nacionalidades.