Pese a ello, su pronóstico sigue siendo muy grave, según el último parte médico. Nieto permanece "estable dentro de la gravedad", aunque en los últimos días ha comenzado a despertar de su situación de coma y presenta "fases de vigilia" y de "reacción a algunos estímulos".

Desde que sufrió el atentado, el psado 8 de junio, no había experimentado cambios significativos. Ahora, el policía abre los ojos y "parece que oye, porque cuando le hablas él te aprieta la mano como si quisiera responderte", manifestaron personas próximas a Enrique Nieto.

El funcionario, que es alimentado a través de una sonda nasogástrica, tuvo que ser sometido a una traqueotomía debido a las abundantes secreciones pulmonares que padece.

Tras superar una primera fase de extrema gravedad después del atentado, Nieto entró en un cma profundo. Desde entonces ha sido sometido a varias intervenciones y sufrió una neumonía, que obligó a volverle a ingresar en la unidad de cuidados intensivos.

Los médicos que le atienden albergan pocas esparanzas sobre la recuperación del policía, debido a la importancia de las secuelas neurológicas tras el disparo que recibió en la nuca, que le hizo perder masa encefálica.