Así lo explicó hoy en rueda de prensa el presidente de la Asociación de Afectados por el Incendio, Víctor Sandoval, tras una asamblea en la que se informó a los comerciantes de las medidas de apoyo que tienen comprometidas ya del Ayuntamiento y el Gobierno regional.

Los negocios más dañados por el siniestro recibirán créditos urgentes para hacer frente de modo inmediato a necesidades como el pago de nóminas.

Para el resto de comercios se dispondrá una línea general de créditos blandos que permitan anticipar el cobro de indemnizaciones.

Según Sandoval, en la asociación hay 88 negocios ya inscritos, pero la cifra de afectados puede rondar los 110. Para todos ellos, dijo que los primeros contactos con las autoridades permiten concluir que las cosas discurren "razonablemente bien".

La asociación tiene el compromiso de las Administraciones municipal y autonómica de promover campañas de promoción comercial en la zona, cuyo volumen de negocio se calcula que ha caído en torno a un 30 por ciento.

En las calles afectadas habrá actividades lúdicas como teatro para niños y espectáculos de mimo, y los comercios se agruparán por sectores para ofrecer artículos con descuentos o, por ejemplo, tratamientos cosméticos a precio reducido a los clientes.

Respecto a los trabajos de demolición de la torre, Sandoval afirmó que el próximo lunes tendrán una reunión con el Ayuntamiento en la que serán informados de los servicios de seguridad y calendario previsible de las operaciones.

En medio de este panorama, Sandoval afirmó que los negocios tendrán que seguir viviendo casos como las bajas laborales por angustia que han registrado ya algunos comercios o la suspensión temporal de empleo que han solicitado los 14 trabajadores del establecimiento Pan y Pica, uno de los más afectados por el incendio.