La miiva de la CCC, que representa a unos 95.000 comercios de Cataluña, señala que dichas comisiones "se caracterizan por una escasa transparencia formal, de información y de conformidad expresa en relación con el cliente".

También acusan a las entidades de emplear criterios en el cobro de comisiones subjetivos y discriminatorios, "tanto en la fijación de la cuantía como del día de valoración de los movimientos de las cuentas corrientes, así como por los cargos y abonos que, casualmente, siempre se determian en perjuicio del cliente y en beneficio de la entidad financiera".

Los comerciantes catalanes señalan a Rojo que "el Banco de España debe intervenir en beneficio de la eficiencia y de la seguridad del sistema bancario español, dotándole de una mayor transparencia".

Esta reclamación ante la máxima autoridad monetaria está basada en un informe jurídico encargado por la CCC, del que no se descarta elevar también la denuncia ante las autoridades de Defensa de la Competencia, por la posible vulneraión de las normas de libre mercado, y de la Ley de Defensa del Consumidor, entre otras.

Entre las medidas que los comerciantes piden revisar figuran los cambios de tarifa sin previo aviso y aplicación de comisiones que no se derivan de su operativo comercial.