El Colegio de Farmacéuticos envió antes de Semana Santa una circular a todaslas oficinas en la que advertía que el pasado sábado era festivo para los trabajadores, según convenio, pero no para la farmacia.

Los propietarios estaban obligados a abrir, pero muchas oficinas cerraron ese día, lo que ha hecho resurgir la polémica creada en torno a los horarios tras la decisión de la farmacéutica Rosa María Lastra de abrir durante las 24 horas del día.

No obstante, el Colegio de Farmacéuticos ha negado que la población quedará desatendida durante algún día de la pasada semana, a que los servicios de urgencias funcionaron con normalidad y "el nivel de asistencia a las oficinas fue muy bajo".

Aunque el Colegio no tiene datos sobre el número exacto de oficinas que permanecieron cerradas el sábado, reconoce que es una situación habitual todos los años.