Camacho no atendió en su momento los 3 requerimientos, 2 de ellos con acuse de recibo, que se le dirigieron para que pusiera al corriente el pago de sus mensualidades. Los colegiados han de pagar 4.500 esetas mensuales.

La Junta de Gobierno de la corporación profesional comunicó a Camacho su baja como profesional no ejerciente. Esta condición le convierte en mutualista de la abogacía y sólo podrá acceder al ejercicio de la profesión si de nuevo se da de alta en el impuesto de actividades profesionales.

La nueva Junta del Colegio adoptó exigir el puntual pago de las cuotas para conservar la colegiación ante el elevado número de morosos que hay entre sus afiliados.

El Colegio de Abogados ha omunicado ya a los órganos judiciales de la provincia de Granada la baja de Camacho y la de otros 25 letrados, tanto ejercientes como no ejercientes, expulsados por el mismo motivo con objeto de que no admitan sus intervenciones profesionales por estar inhabilitados temporalmente para la práctica de la abogacía.