Lozano, que sufre una grave disminución física que le obliga a trasladarse en silla de ruedas, viajó en avión acompañado por un agente de la policía judicial desde Mallorca hasta Barcelona, donde fue ingresado en el Hospital San Camilo.

El magistrado del juzgado de instrucción número 1 de Palma de Mallorca condenó a José Lozano a 3 años de destierro del territorio baler, en aplicación de la ley de peligrosidad social, por romper 80 escaparates comerciales.

Esta es la segunda vez que José Lozano es expulsado de Baleares. El pasado 9 de febrero, un policía judicial le acompañó al hospital San Camilo en Barcelona, pero no fue aceptado por los responsables del centro.

Tras dormir una semana en las calles de la Ciudad Condal, regresó a Palma de Mallorca donde fue detenido por la policía por incumplir la orden de destierro dictada por el juez.

José Lozano no esá obligado a permanecer en el hospital San Camilo contra su voluntad. Según ha podido saber Servimedia, Lozano tiene la firme intención de volver a Mallorca en menos de 10 días.

El "cojo manteca" se ha dedicado los últimos 10 años a romper los escaparates de los comercios para provocar su ingreso en prisión y recibir así la atención que necesita.