Esta organización afirma que el documento presentado por Borrell se limita a orecer un listado de grandes obras hidraúlicas, en su mayoría embalses, cuya construcción en la mayoría de los casos apenas se justifica en el documento.

Según la Coda, los embalses que generarían un fuerte impacto medioambiental son: La Garita (Cuenca); El Cañal, Piedrala y Abenojar (Ciudad Real); La Colada (Córdoba); Las Cruces, Sierra Bermeja, Cerros Verdes, Villalba de los Barros, Riscos de Higüeña, Puertos de Guadarranque y Calamón (Badajoz); Alcollarín (Cáceres); Andévalo, Sanlucar, Blanco, Jarraa y Alcolea (Huelva).

También asegura que en este plan se advierte un "absoluto desprecio hacia la normativa ambiental, llegando a los extremos de incluir embalses de los que ya existe una declaración de impacto negativa, publicada en el BOE.

Este es el caso del embalse de Cerros Verdes, que se incluye en el plan y cuya declaración de impacto negativa se publicó en verano de 1993.

También destacan la declaración de impacto del emalse del Andévalo rebajaba su volumen a 600 hectómetros cúbicos sin embargo, en el plan hidrológico de la Cuenca del Guadiana aparece con 1.000 hectómetros cúbicos de capacidad.