Este vehículo, concebido por un equipo de ingenieros de la Universidad de Biel, empezó a ser conocido a raíz de su victoria en una conocida carrera denominada "Desafío Solar Mundial de 1990", que se celebró en Adelaida(Australia) en diciembre de ese año, y en una segunda carrera internacional, disputada en Phoenix (Arizona) meses más tarde.

En ambos casos, el "Espíritu de Biel/Bienne II" superó a otros 39 prototipos de conocidas marcas del mundo automovilístico, como Honda o General Motors, recorriendo en 47 horas y media los 3.004 kilómetros de que constaba la prueba, lo que le permitió llegar a la meta con un día de ventaja respecto al segundo participante.

El coche tiene el record de velocidad de prototipossolares (102 kilómetros por hora), pesa 175 kilogramos en vacío y está provisto de un generador solar Telefunken que pesa 19 kilogramos construido en silicona y las placas solares en fibra de vidrio.

El motor desarrolla una potencia máxima de 1.100 vatios y tiene un voltaje de 65 voltios.

"Desafío Solar Mundial 1990", según su organizador, Hans Tholstrup, tuvo como objetivo demostrar que los coches solares son capaces de viajar distancias largas. Tholstrup cree que este modelo de coche reemplazar a los de gasolina en menos de diez años.