Según argumenta en la pregunta el diputado de CC Paulino Rivero, "la riada migratoria, a la que Canarias no es ajena, ha hecho que el islam se convierta en la segunda religión con más adeptos en el Estado español".

El parlamentario añade que en el seno de esta comunidad relgiosa existe un conflicto interno: "Los moderados, fundamentalmente españoles, se quejan de la creciente influencia de los fundamentalistas, que suman a los inmigrantes en sus filas y están, al parecer, financiados por terceros países".

Según Rivero, los representantes de esta comunidad adscritos al sector tradicional denuncian que la Administración estatal descuida las repercusiones que puede tener en España un movimiento islámico radicalizado.

Por último, indica que "el propio (Josep) Piqué (miistro de Asuntos Exteriores) ha asociado la inmigración ilegal, algo que padece especialmente el archipiélago canario, a la praxis terrorista".