Para paliar las pérdidas ocasionadas a los agricultores, deben establecerse moratorias en los pagos de aquellos productores con créditos pendientes, así com refinanciar la deuda con intereses no superiores al 3 por ciento.

La Coag solicita a la Administración la condonación de los pagos de la contribución rústica y de las jornadas teóricas, de manera que ello compense parte de las pérdidas, y que las instituciones correspondientes repartan gratuitamente productos fitosanitarios.

Reclaman esta última medida para combatir las enfermedades que se originan en los cultivos cuando se producen catástrofes de este calibre.

En Aragón, los daños se han etendido al 100 por 100 de la almendra y la vid y al 90 por ciento del olivo en la comarca del Bajo Aragón-Teruel; la totalidad de la cosecha de melocotón, pera y manzana en el Bajo Cinca (Huesca) quedó arrasada, y también se han producido importantes destrozos en los cultivos de hortaliza, maíz y girasol en El Temple y Almudevar.

En Cataluña, las comarcas más afectadas han sido La Noguera y Pla d'Urgel en Lerida y el Baix Ampurdá en Gerona. En estas zonas los principales daños se han producido en los ultivos de manzana y pera, llegando a afectar al 30 por ciento de la cosecha en Gerona.