En un comunicado, la COAG, ante la falta de garantías de que este tipo de productos no conllevan riesgos para la salud y el medioambiente, pide a los agricultores que extremen las precauciones respecto a las variedades de maíz transgénico.

Según COAG-Iniciativa Rural, la incidencia del "taladro" en España es significativa sólo en aquellas zonas en las que se repite continuamente el cultivo. Por este motivo, la coordinadora considera que no es necesario utilizar maíces transgénicos pra combatir la plaga.

"Una adecuada rotación y determinadas prácticas de cultivo sirven para minimizar el riesgo, ya que estas variedades no muestran más resistencia ni más producción que otras no manipuladas ya disponibles en el mercado. Además, se ha comprobado que con el uso de variedades transgénicas aumenta la incidencia de la araña roja, que si está considerada como una plaga de incidencia más importante que el taladro", explica la nota.

COAG-Iniciativa Rural se ha reunido con la firma Novatis (multinacional que produce maíz transgénico) para transmitirle la preocupación de los agricultores ante la falta de información sobre el control de posibles riesgos.

En este sentido, la coordinadora ha denunciado reiteradamente la no participación de los agricultores en la Comisión Nacional de Bioseguridad, y la falta de transparencia de la misma.