El acuerdo, firmado por la directora del Instituto Cervantes, Carmen Caffarel, y el presidente de la CNSE, Luis J.Cañón, contempla, entre otros programas, la realización de actividades de difusión y divulgación de la lengua de signos española, así como la elaboración de planes curriculares de enseñanza de esta lengua.

Además, el convenio, firmado en la sede del instituto en Madrid, establece la realización de actividades para difundir la lengua y la cultura españolas mediante recursos accesibles para las personas sordas.

Asimismo, ambas entidades intercambiarán experiencias en el ámbito de las nuevas tecnologías y, en especial, la adaptación de los portales y páginas web del Instituto a la lengua de signos española.

En esta línea, y durante la firma del acuerdo, Caffarel señaló que el objetivo del convenio "es convertir la lengua de signos en algo cotidiano en los 70 centros Cervantes repartidos por el mundo".

También Caffarel quiso destacar que "éste es un paso importante pero no el primero", en referencia a la reciente presentación del primer Diccionario Normativo en Lengua de Signos Española, que tuvo lugar en esta entidad, y señaló que el Instituto Cervantes es "desde hoy, la casa de la lengua española pero también de la lengua de signos española".

Por su parte, Cañón afirmó que "la lengua de signos española y su cultura son patrimonio del Estado y merecen toda la protección". En su opinión, la firma de este convenio es un reto "porque hasta hace poco tiempo teníamos que explicar a las autoridades que era esta lengua y ahora estamos procediendo a su difusión".

En este sentido, Cañón aseguró que éste es el "momento adecuado" para la firma de este convenio, porque, explicó, "hace un año se reconocía legalmente la lengua de signos, que durante años ha sido prohibida y apartada".