La decisión, adoptada en la reunión del Consejo de la CNMV celebrada hoy, se produce tras la información enviada por el Santander y Total al regulador.

Total y SCH constituyeron una empresa, Somaen Dos, que tiene el 33,23% de Cepsa (19,92% SCH, 8,31% Total, y 5% Unión Fenosa) y se comprometieron contractualmente a no modificar sus posiciones en la compañía. Total tiene adicionalmente el 36,97% de Cepsa.

Sin embargo, tres años atrás, tras modificarse la normativa sobre pactos parasociales en España, el Santander decidió adquirir un 12,35% adicional de Cepsa. Total lo denunció y el asunto fue sometido a un arbitraje que derivó en un laudo, dictado hace tres meses, que las empresas deben aplicar ahora y sobre cuya repercusión se pronuncia la CNMV.

Según el laudo, debe disolverse la sociedad Somaen Dos, con lo que el Santander debe vender un 4,5% de Cepsa a la petrolera francesa.

El regulador da por buenos los planteamientos de Total, que controla alrededor del 45% de Cepsa, en el sentido de que la compra de dicha participación al Santander no supone una nueva adquisición, sino de la restitución de una participación que ya era suya.

Si la CNMV hubiera considerado este proceso como un aumento de la participación de Total en Cepsa, entraría en funcionamiento la ley de opas que haría a la francesa adquirir un 10% adicional de la española, con lo que superaría el 50% y debería ir a por el 100%.