En todo caso, la CNMC no descarta que alguna estación de servicio individualmente haya absorbido una parte de la bonificación y haya incrementado los márgenes.

En este sentido, la CNMC está realizando una vigilancia continua de este mercado, atenta a las alertas y reclamaciones recibidas y en continua colaboración con las entidades responsables de velar por la aplicación adecuada de esta medida.

La CNMC realiza de forma habitual y continua un seguimiento de la distribución minorista de carburantes en estaciones de servicio. Mensualmente, publica un informe en el que se analiza la evolución de precios, márgenes brutos y relación con la evolución de las cotizaciones internacionales, entre otros aspectos.

Desde el comienzo de la invasión de Ucrania la cotización de los productos refinados en los mercados internacionales ha aumentado de forma sostenida y con gran volatilidad, registrando incrementos muy superiores a los del petróleo (cotización Brent).

Según la CNMC, la subida se explica en la parte del gasóleo por la incertidumbre sobre las exportaciones de gasóleo ruso. En el caso de la gasolina, más recientemente, por el incremento de la demanda en EEUU, derivado del mayor consumo estacional debido a la llegada del verano y, en consecuencia, la mayor importación de los productos desde Europa.

La bonificación entró en vigor en un momento (abril de 2022), posterior a las grandes subidas de los mercados del mes de marzo, especialmente acusadas en el gasóleo, y su implantación ha coincidido, durante los tres primeros meses (de abril a junio), con una tendencia alcista sostenida de las cotizaciones internacionales, explica la CNMC.