Garrido respondió así al Comité Nacional de Prevención del Tabaquismo (CNPT), que acusó al Club de Fumadores "de estar al servicio de la industria tabaquera" y de ser una organización "pantalla", creada por dicha industria para "dar un mínimo de credibilidad" a mensajes que, "por sí misma, no podría defendersin que se la acusara de anteponer sus propios intereses económicos a la salud de los ciudadanos".

"El club cuenta con una revista, 'El fumador', en la que hay publicidad de todo tipo de empresas, entre ellas de tabaco, pero es independiente de todas ellas", afirmó Garrido tras presentar en rueda de prensa una encuesta sobre la opinión de los trabajadores frente a la futura prohibición de fumar en los centros laborales.