"A mi gustaría que los dos apellidos del nuevo seleccionador nacional fueran españoles, porque lo mismo que tenemos grandes jugadoes, e incluso exportamos a otros países, también hay suficiente calidad en el ámbito de los entrenadores", explicó González.

En su opinión, "seguro que cualquiera de los entrenadores con nombre y apellidos españoles que hoy en día están entrenando clubes de fútbol serían unos magníficos seleccionadores".

González señaló que la renuncia de Javier Clemente "viene a aliviar una situación que estaba llegando a unos límites realmente preocupantes". A su juicio, la situación "estaba excesivamente tensinada y no creo que fuera bueno para la propia selección española".