La arrendataria del local, Justina Rodríguez, señaló que "no hay posibilidad de acuerdo porque piden 00.000 pesetas al mes, lo que convierte en inviable cualquier intento de continuidad del Xúcar".

Este cine fue arrendado en 1985 por un periodo de 5 años, que posteriormente fue prorrogado. Según Justina Rodríguez, durante este tiempo se redactó un proyecto para reabrir una antigua sala, pero no prosperó a causa del alto presupuesto.

La arrendataria indicó que la infraestructura del local es "insalvable", ya que no tiene ni salidas de emergencia, por lo que la modificación supondría una inversiónexcesivamente elevada.

Por su parte, José Manuel Martínez Cenzano, alcalde de Cuenca, señaló en un comunicado su disgusto y sorpresa ante la noticia del cierre.

"La sorpresa", añadió el alcalde, "viene motivada por la inexistencia de noticias previas que hubieran puesto en antecedentes a la autoridad municipal".

Por otro lado, Justina Rodríguez aseguró que el trabajo en el Xúcar ha sido una experiencia negativa, debido a que la aparición de televisiones privadas ha provocado un descenso de a menos el 60 por ciento en el número de espectadores.