En el texto de la declaración, que ya ha sido remitida al resto de grupos parlamentarios, Ciudadanos recuerda que el 10 de julio de 1997 ETA secuestró a este político y amenazó con acabar con su vida en 48 horas si el Estado “no se plegaba a sus exigencias”. Dos días después, los terroristas llevaron a cabo su amenaza y terminaron con su vida.

Esos días, señala el partido, sumieron en una “profunda conmoción” a la sociedad española y a la sociedad internacional “en su conjunto”, generando una de las respuestas “cívicas más multitudinarias de la historia” de España, con “millones de personas” en todos los pueblos y ciudades “alzando sus manos blancas mostrando su dolor y exigiendo el fin del terrorismo”.

Asimismo, apunta que dos de los asesinos de Miguel Ángel Blanco continúan en prisión. El tercero, señala Ciudadanos, que se suicidó dos años después, recibió un funeral “con honores, vivas al terrorismo” y con presencia del actual coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi.

Para Ciudadanos, Miguel Ángel Blanco es , junto con el resto de víctimas de ETA, un “símbolo de nuestra democracia y de la victoria de la sociedad española en su lucha contra el terrorismo”. Por ello, “el Congreso de los Diputados expresa su más firme y unánime condena por su asesinato y por todos los crímenes de la banda terrorista ETA”.