Así lo expresó, en declaraciones a Servimedia, Manel Silva, portavoz adjunto de CiU en el Congreso, para quien ERC hará un "mal negocio" con este entendimiento con los socialistas catalanes.

Silva afirmó que es un mal acuerdo para la formación nacionalista, porque "estará subordinada al PSOE en el Senado" y sus vtantes tendrán que apoyar "candidaturas exclusivamente socialistas en la circuscripción de Barcelona".

No obstante, el dirigente de CiU se mostró convencido de que esta alianza no afecta "en absoluto" a las relaciones que su coalición y ERC puedan tener esta legislatura en el Parlamento catalán.

El dirigente de CiU añadió que tampoco el PSOE hace un "buen negocio" con este acuerdo, que definió como una "inutilidad" y un "puro acuerdo aritmético para intentar tener algún senador más con absoluta dpendencia y desprecio de planteamientos políticos".