Hasta el momento, la ley del 28 de diciembre preveía una aplicación reducida del 4%, en vez del 16%, tanto en la compra como en las reparaciones de vehículos, adaptados o no, utilizados habitualmente para transportar a personas con movilidad reducida siempre que conduzca la misma persona discapacitada.

Con la proposición presentada por CiU, se pretende que la reducción del IVA se aplique tanto a los conductores discapacitados como a sus familias en el caso de que ellos no sean los que conduzcan pero sí utilicen coche para sus desplazamientos.

Concretamente, el grupo parlamentario en el Senado propone el siguiente texto: "Se aplicará un 4% de IVA tanto en la compra como en las reparaciones de vehículos, adaptados o no, utilizados, de manera habitual, para transportar personas con movilidad reducida, con independencia de quien efectúe las tareas de conductor".

Con esta modificación, Macias espera "conseguir eliminar la discriminación a que están sometidas muchas familias con discapacitados o personas sin movilidad, que ahora no se pueden acoger al régimen fiscal, previsto para vehículos conducidos por personas con movilidad reducida".

"La paradoja", sostiene el senador, "es que mientras para una persona que puede conducir existen ayudas, para una persona imposibilitada del todo su familia no dispone de ningún apoyo".