Tras el primer encuentro de Barcelona, Anasagasti señaló que los partidos nacionalistas "pasaremos de las generalidades a tratar las cosas concretas; de las musas, al teatro".

Afirmó no entender la polémica que se ha levantado por la "Declaración de Barcelona", ya que "la Constitución habla de nacionalidades y regiones, aunque nadie se atreve a poner el cascabel al gato".

En su opinión, los partido nacionalistas "no queremos imponer nada a nadie, pero tampoco queremos que nos impongan su visión estrecha de la vida, nada más. Eso, en democracia, se llama discrepancia civilizada".