Guardans declaró a Servimedia que la crisis que se ha abierto en Italia tras la renuncia del ministro de Asuntos Exteriores es tremendamente preocupante, porque lo que haga el Gobierno italiano no sólo perjudica a este país, sino al conjunto de la construcción europea".

Por ello, llamó a la "responsabilidad" del Gobierno que preside Berlusconi y pidió a Aznar que, "en su doble condición de líder de la derecha europea y presidente del Consejo de la Unión, le transmita la necesidad de no perjudicar el proceso de construcción europea, que no es un término retórico".

"Cuesta creer que un primer ministro pueda ejercer como reponsable de Asuntos Exteriores de forma eficaz en la Unión Europea de hoy, cuando se habla de contar con un ministro dedicado exclusivamente a asuntos europeos", lamentó.

En este contexto, recalcó que "poner a una figura como Berlusconi al frente de la cartera de Exteriores demuestra una falta de respeto a la integración europea y el día a día de la Unión en estos momentos".

Guardans insistió en que "es la obligación de Aznar dar un toque de atención a Berlusconi, porque éste no es un asunto de plítica interna italiana, pues afecta a todos los europeos y pone en peligro nuestro futuro. En este caso, tiene el deber de intromisión", concluyó.