Así se refleja en el avance de resultados del barómetro de enero que publicó este jueves el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que también muestra que un 1,8% asegura que esa obligatoriedad tendría que considerarse en función de los casos y el restante 41,3% de los encuestados que no habría que obligar a nadie.

Además, el 24% de los entrevistados obligarían al pinchazo al personal sanitario, al personal que trabaja en las residencias de personas mayores, y a los/as que tienen relaciones profesionales directas con el público en general.

Los resultados del CIS se basan en 3.777 entrevistas realizadas entre el 3 y el 14 de enero y también muestran que la pandemia preocupa a los españoles. De hecho, cuando se pregunta si en estos momentos, les preocupa más los efectos de esta crisis sobre la salud, o los efectos de la crisis sobre la economía y el empleo, el 39,8% aseguran que sobre la salud, el 32% sobre el empleo y el 27% confiesan que ambos por igual.

Esa preocupación también se refleja en la necesidad de endurecer las medidas para frenar los contagios. Ante la evolución de la pandemia, casi cuatro de cada diez, el 38,9% cree que habría que tomar medidas de control y aislamiento más exigentes; para el 25,6 se puede continuar con las mismas y un 27,8 apunta que se podrían ir relajando.

Para quienes quieren endurecer los protocolos el camino sería dotar de más recursos para reforzar el sistema sanitario (97% de quienes piden más mano dura) y el uso obligatorio de mascarillas en interiores (para el 95,8% de los que quieren medidas más exigentes).

Sin embargo, el 54,7% de los encuestados creen que lo peor ha pasado ya en relación con la situación sanitaria generada por el coronavirus en España. Aún así, el 21,5% cree que seguimos en el peor momento y el 11,5% piensa que lo peor está por llegar.

El CIS también pregunta a los españoles si ha tenido contacto con los servicios sanitarios por pensar que tenía síntomas relacionados con el coronavirus o por otras causas relacionadas con el coronavirus. El 41,1% dijo que sí y el 58,7% aseguró que no.

Quienes sí contactaron lo hicieron en un 59,3% con su médico de atención primaria y presentaron principalmente síntomas de fiebre, síntomas de gripe/resfriado, tos seca, dolor de cabeza y dolores musculares. Un 21,8% de esos ciudadanos que contactaron con el médico por sospecha de tener coronavirus no presentó sintomatología.

ATENCIÓN POR TELÉFONO

Asimismo, el barómetro refleja que la atención sanitaria se llevó en un 91,9% de los casos atendidos por teléfono. El 12,8 acudieron al centro de salud y el 4% a urgencias del hospital.

La valoración de las personas atendidos fue, en un 36,1% de los encuestados "muy buena" y para el 42,1% "buena". Sólo para el 14,7% fue mala o muy mala. La atención incluyó una prueba del coronavirus en el 80% de los encuestados que tuvieron contacto con los sanitarios. Al 45,7% se le diagnosticó positivo en covid.

Por otra parte, el 96% de los españoles asegura que se ha vacunado de la covid-19 (el 41,7% con tres dosis) y el 50,3%de los encuestados con hijos de entre 5 y 11 años reconoce que los ha llevado a inocularse la primera dosis contra el coronavirus.

Quienes no se han vacunado esgrimen que no se fían de estas vacunas (27,3%), no creen que sean eficaces (11,1%), han pasado la enfermedad (10,4%), tienen miedo a riesgos para la salud/efectos secundarios-colaterales (10,3%) o consideran que no tienen garantías por pocos ensayos (9,7).

No obstante, el 18% de quienes no se han vacunado están dispuestos a hacerlo.

Finalmente, el barómetro refleja la impresión general de que la sociedad pide a las autoridades del gobierno central y los autonómicos que se coordinen para afrontar la pandemia.

El 67,3% de los preguntados son de ese parecer, frente al 18,4% que piensa que debería ocuparse el Ejecutivo de Pedro Sánchez y el 5,8% los gobiernos regionales.