El secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Jorge Fernández Díaz, que presentó los resultados en el Congreso de los Diputados, aseguró que los datos del sondeo monográfico del CIS sobre el sistema educativo reflejan un respaldo mayoritario de los españoles a la reforma del Gobierno para mejorar la calidad de la enseñanza.

El barómetro de maro revela que el 26,2 por ciento de los españoles considera que la situación de la enseñanza es buena (24,8 por ciento) o muy buena (1,4 por ciento), frente al 22,4 por ciento que la percibe como mala (15,9 por ciento) o muy mala (6,5 por ciento). El 41,8 por ciento entiende que es regular.

Respecto al estado en que se encontraba la educación hace 15 o 20 años, el 40,8 por ciento considera que es mejor, el 14,8 ciento cree que es igual y el 32,1 por ciento defiende que ha empeorado.

En términos geerales el 34,7 por ciento afirma que la calidad de la enseñanza en la actualidad es buena (32,9 por ciento) o muy buena (1,8 por ciento), frente al 16,1 por ciento que la ve mala (13,3 por ciento) o muy mala (2,8 por ciento). En todo caso, son mayoría relativa el 40,3 por ciento que la califican como regular.

Un 65,5% de los encuestados abogan en favor de que haya más disciplina en las aulas. También hay una amplia mayoría que reclaman más autoridad de los profesores (64,9 por ciento), más respeto de os alumnos hacia sus enseñantes (89,8 por ciento) y más autoridad de los directores de los centros (64,2 por ciento).

En este sentido, entiende el 69 por ciento de los españoles que los profesores deberían tener la faculdad de imponer castigos, frente al 29,1 por ciento que descarta esa posibilidad.

De entre los que defienden la imposición de castigos, el 44,8 por ciento se decanta por la imposición de tareas extras a los alumnos transgresores, el 27,1 por ciento propone la supresión del recreo ysólo el 14 por ciento sugiere la expulsión de clase como método de castigo.

Sobre los contenidos que se imparten en los colegios e institutos, el 59 por ciento afirma que son susceptibles de mejora y el 22,9 por ciento los considera suficientes. Uno de cada tres encuestados se muestra descontendo con el nivel de esfuerzo que hacen los alumnos para aprender y cerca de la mitad afirman que en la actualidad se les exige poco o muy poco a los estudiantes.

En lo tocante a la responsabilidad de los cenros educativos y la familia en el desarrollo social y personal de los jóvenes, el 63,7 por ciento afirma que debe ser compartida a partes iguales, el 32,2 por ciento opina que la responsabilidad principal debe recaer sobre la familia y sólo el 2,8 por ciento la atribuye a los centros educativos.

Fernández Díaz aseguró que estos datos evidencian que los españoles "respaldan de una manera abrumadora" la reforma que planea Pilar de Castillo para la enseñanza, lo que resulta "satisfactorio" para el Gobiero.

RELIGION

En cuanto a la enseñanza de religión en los centros de enseñanza públicos, el 82,5 por ciento se decanta a favor de que se imparta la doctrina católica siempre que los alumnos lo deseen. En cambio, cuando se trata de religiones como la musulmana, la judia o la protestante, sólo se decantan a favor el 49 por ciento, y el 35 por ciento se pronuncian en contra.

El barómetro del CIS aborda también la polémica sobre el uso del pañuelo por parte de las jóvenes musulmanas en los colegios epañoles.

En este punto, el 40,4 por ciento de los encuestados se manifiestan en contra del uso de esa prenda en los centros de enseñanza, mientras que el 31,7 por ciento se pronuncia a favor.

BOTELLON

El estudio sobre lo jóvenes realizado por el CIS en el mes de marzo aborda, igualmente, los problemas relacionados con el alcohol y sus derivaciones relacionadas con el fenómeno del "botellón".

El 94,7 por ciento entiende que los jóvenes españoles comienzan demasiado pronto a consumir bebidasalcohólicas y por ello, el 91,1 por ciento defiende que se exija el cumplimiento de las prohibiciones vigentes para impedir el consumo entre adolescentes.

El trabajo de campo de este barómetro se realizó en plena polémica sobre el "botellón", que preocupa a 87,4 por ciento de los encuestados, frente al 9,8 por ciento que no se declara inquieto por este asunto.

En términos generales, al 28,5 por ciento de los españoles les parece bien (24,9 por ciento) o muy bien (3,6 por ciento) la costumbre de ls jóvenes de divertirse los fines de semana durante toda la noche, mientras que al 44,7 por ciento le parece mal (27,4 por ciento) o muy mal (17,3 por ciento).