Los niños, que fueron recibidos con gran emoción, partieron de su ciudad en un ferry que les dejó en el puerto italiano de Azcona, donde les esperaba un autobús que partió desde Cáceres en la madrugada del 1 de agosto.

Previamente, el presidente de esta asociación y demás socios habían convocado a los 'padres adoptivos' de los niños para explicarles los requisitos que han de cumplir en el mes de agosto durante el cual los niños bosnios permanecerán en la ciudad extremeña. Aunque la mayoría de las familias que acogerán a los menores son de Cáceres capital, también hay algunas de Plasencia (Cáceres) o Badajoz. Los gastos de la estancia que supondrán unos 2.800.000 pesetas, han sido subvencionados por el Ayuntamiento de Cáceres y la Diputación Provincial de Badajoz.