La campaña está promovida por Cáritas, la Conferencia Española de Religiosos (CONFER), Justicia y Paz, Manos Unidas y REDES, que reúne a más de 40 ONGs de diferentes congregaciones religiosas.

Según la CONFER, el objetivo de esta iniciativa es concienciar a la sociedad española de que todavía persiste el grave problema de la deuda externa en los países empobrecidos y reafirmar el compromiso cristiano de que "la vida es antes que la deuda" y que, por tanto, "aliviar esta carga es cuestión de justicia".

Las cinco instituciones eclesiales justifican su decisión al indicar en la convocatoria que "nuestro compromiso con los Objetivos del Milenio nos lo exige".