Los hechos ocurrieron a las 2 de la madrugada, cuando unos 500 jóvenes, según la policía, increparon a miembros de la Guardia Urbana que patrullaban por la zona, a quienes seguidamente lanzaron piedras y botellas.

Como consecuecia de los incidentes resultaron también dañados varios vehículos que estaban aparcados en el cruce de las calles París y Aribau. Al iniciarse los incidentes, efectivos del Cuerpo Nacional de Policía acudieron al lugar para ayudar a los urbanos.

Los cinco jóvenes detenidos, Carles Antolí, Pere Grau, Ignasi Egío, Pau Carbó y Lluís López, pasarán a disposición judicial en las próximas horas. Según un testigo de los hechos, el propietario del bar "París", los agresores, de entre 20 y 30 años, lanzaron grtos a favor del Barça.

Tanto la policía estatal como la municipal pusieron en marcha esta mañana un dispositivo especial de vigilancia en las calles de la ciudad con el fin de controlar a los seguidores que esta tarde se desplazarán a Barcelona para ver el partido de fútbol entre el Barça y el Real Madrid.