DE LA CIERVA, ABSUELTO PESE A SER CONSIDERADO AUTOR DE UN DELITO DE INJURIAS POR LLAMAR A BANDRES "ENCUBRIDOR DE ASESINOS"

MADRID
SERVIMEDIA

El escritor e historiador Ricardo de la Cierva ha sido absuelto por la sección tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional pese a ser considerado autor de un delito de injurias por llamar "insultador parlamentario" y "encubridor de asesinos" al eurodiputado de Euskadiko Ezkerra Juan María Bandrés.

La sentencia, que ha cntado con el voto particular en contra del magistrado José Ricardo de Prada, reconoce la existencia del delito, pero considera prescrita la responsabilidad criminal de su autor por haber transcurrido más de cinco años desde que ocurrieron los hechos, en octubre de 1983, y el comienzo de las actuaciones judiciales, en junio de 1989.

La acusación pedía 10 años de confinamiento para De la Cierva por escribir un artículo titulado "La sociedad suicida" en el diario "Ya", en el que hacía referencia a una seión parlamentaria en la que Bandrés se mostró partidario de la despenalización del aborto.

En su escrito, el periodista aludió al "siniestro currículum" de Bandrés, como abogado y defensor de presos etarras, y a "su cinismo habitual", además de utilizar las citadas expresiones que el mismo tribunal de la Audiencia Nacional califica de "despectivas, deshonrosas y engendradoras de descrédito".

La Sala subraya que el contexto general del párrafo dedicado al entonces diputado encerraban "una clara inención de ofender" y sus palabras buscaban "no desmontar los argumentos" de Bandrés, sino "descalificar y desligitimar a dicho señor por su forma de comportarse en las Cortes (...) y por sus actuaciones en defensa de acusados por delitos de terrorismo".

No obstante, por problemas formales y de competencia, la querella interpuesta en su día por Bandrés no dio sus frutos hasta junio de 1989, ya que todas las actuaciones judiciales anteriores a esa fecha, tramitadas en la Audiencia de Madrid, son consideadas nulas por el tribunal.

El voto particular del magistrado de Prada sin embargo que De la Cierva debería ser condenado a 8 años de confinamiento y al pago de una indemnización de dos millones de pesetas al eurodiputado, ya que la persecución penal de los hechos se inició desde el momento mismo en que se presentó al denuncia en el juzgado de instrucción, días después de la publicación del artículo.

(SERVIMEDIA)
16 Mayo 1993
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