Sin embargo, esta caída de actividad no se produce en todos los sectores. Además del turístico que, lógicamente, registra en agosto un enorme movimiento, otros compensan el retroceso general y sostienen los intercambios comerciales este mes.

El más importante es el de la construcción, cuya evolución cíclica sigue un patrón propio marcado por las mejorías en el segundo semestre del año, tanto en niveles de actividad comercial como en el comportamiento en pagos. Esto se debe, fundamentalmente, al efecto del buen tiempo en los procesos de construcción.

Otros sectores también repuntan en vacaciones. El sector de los electrodomésticos, gracias a las ventas de aire acondicionado y de aparatos de electrónica de consumo, y el de alimentación-distribución, fruto de la demanda en zonas costeras e islas, son los que sostienen el nivel de intercambios en vacaciones.