Esta edición ha presentado el 50 por ciento más de superficie de exposición, pasando de los 20.000 metros cuadrados de la edición de 2005 a los 29.000 metros cuadrados de este año, ocupando los palacios 6 y 7 del recinto de Montjuic de Fira de Barcelona.

A la exposición asistieron unos 300.000 expositores provenientes de 16 países, y las ventas de vehículos ha sido otro de los puntos destacados de esta edición pues se han vendido unos 100 vehículos y unas 200 motocicletas.

Para el presidente de Auto Retro Barcelona, Fermín Sulé "se ha demostrado que la adaptación de automóviles clásicos para el gran público es muy aceptada, y las numerosas transacciones que se produjeron durante estos tres días son ejemplo de ello".