Los quiosqueros, muchos de los cuales han cerrado hoy sus locales, piden al Ejecutivo que les permita volver a vender tabaco, como ocurre con otros sectores del comercio, o que, de lo contrario, les ofrezca "una alternativa de negocio" para no quedar en paro, según declaró a Servimedia el presidente de la Confederación de Vendedores de Prensa (Covepres), Juan Vicioso, organización convocante de la huelga.

"Si el bar de enfrente vende tabaco y el tabaco sigue matando, ¿por qué nosotros, que llevamos vendiendo tabaco antes que nadie, no podemos venderlo?", se preguntó Vicioso, quien aseguró que esta prohibición llevará al paro a muchos quiosqueros españoles.

Al término de la manifestación, hacia las dos de la tarde, los quiosqueros tienen previsto entregar en el ministerio unas 500.000 firmas contra la ley del tabaco recogidas en los últimos días entre sus clientes.

Si estas firmas y el paro de hoy no varían la posición del Gobierno, los propietarios de los quioscos se plantean realizar huelga durante una semana completa, ya que de todas formas, indicó el presidente de Covepres, la mayoría de ellos terminarán por cerrar sus establecimientos.

Durante la concentración, los manifestantes mostraron pancartas con lemas como "Zapatero, el tabaco mata de cáncer; vuestra ley nos matará de hambre", "Os estáis fumando el pan de nuestras familias" o "Prohibido vender; permitido recaudar".

Entre pitidos, los quiosqueros concentrados ante el Ministerio de Sanidad corearon también frases del tipo "Zapatero fuma en La Moncloa"; "No más paro, queremos vender" o "Que salga la Salgado".

La huelga de hoy, que no ha contado con el apoyo de algunas asociaciones del sector, está promovida, además de por Covepres, por la Asociación Española de Puntos de Venta de Tabaco (Aepvetab) y a ella estaban llamados los quiosqueros de 35 ciudades españolas, que también se manifestaron frente a las delegaciones del Gobierno en distintas comunidades.