CIENTIFICOS ESPAÑOLES DEMUESTRAN QUE EL YOGUR NO GENERA FLORA INTESTINAL Y NO PRODUCE EFECTO BENEFICIOSOS DISTINTOS A LA LECHE

MADRID
SERVIMEDIA

El yogur tradicional no tiene efectos probióticos sobre la salud humana e influye en el organismo de igual manera que el yogur pasteurizado, según las conclusiones preliminares de un estudio realizado por un equipo de investigadores del Hospital Ramón y Cajal.

El trabajo presentado hoy en Madrid, ha sido dirigido por el doctor Javier Yuste. Se realizó con 114 personas sanas y tenía como objetivo comparar los resultados de la ingesta de yogur tradicional y pasteurizado en individuos snos.

Se trata del primer estudio realizado en el mundo con seres humanos, que permite arrojar luz sobre un debate que mantiene dividida a la comunidad científica, que afecta a las multinacionales de productos lácteos y que ha sido la causa principal de la reciente decisión del Códex Alimentarius de no autorizar la denominación de "yogur" para los productos pasteurizados.

El estudio presentado hoy en Madrid demuestra, según aseguró el doctor Yuste, médico de Sanidad Nacional y jefe de Salud Labora del Ramón y Cajal, que las bacterias lácticas del yogur tradicional no sobreviven en el tracto intestinal humano por la acción de los jugos gastrointestinales, por lo que "no pueden producir ningún efecto beneficioso".

No obstante, el director del estudio señaló que eso no quiere decir que el yogur, pasteurizado o no, no sea muy recomendable desde el punto de vista alimenticio que "lo es" pero, subrayó, que su ingesta supone lo mismo que la de leche o queso.

HUMANOS Y RATONES

El estudio sobre os distintos tipos de yogur se realizó con 114 individuos sanos, que fueron divididos en tres grupos: dos grupos experimentales de 48 individuos (51 mujeres y 45 varones) y un grupo de control al que no se le administró yogur de 18 personas. Los voluntarios para la realización de este trabajo tenían edades comprendidas entre los 18 y los 30 años.

Los científicos administraron durante 15 días yogures de ambos tipos a los distintos grupos, antes de comenzar el experimento se comprobó que en cada 125 cc e yogur tradicional existían 1.250 millones de bacterias lácticas, en el pasteurizado ninguna.

Hasta ahora, según los expertos, los principales beneficios atribuidos a las bacterias lácticas del yogur eran la renovación de la flora intestinal, el reforzamiento del sistema inmune y la prevención del cáncer de colon.

Sin embargo, el doctor Yuste aseguró que en los voluntarios a los que se les administró yogur tradicional no se encontró ninguna bacteria láctica viva en su intestino, al igual que en os que tomaron yogures pasteurizados y en los voluntarios que no ingirieron ningún tipo de yogur, por lo que se demuestra que tomar yogur no tiene ningún efecto sobre el intestino, según los resultados del estudio.

Este experimento se realizó previamente con ratas, por el catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad San Pablo CEU, Emilio Herrera, y los resultados fueron exactamente iguales, ninguno de los dos tipos de yogur dejaron restos de bacterias lácticas en el intestino de ls roedores. Según explicó Herrera, las bacterias lácticas morían a las 2 horas de su ingesta.

(SERVIMEDIA)
31 Jul 2003
M