CIENTÍFICOS Y ECOLOGISTAS DENUNCIAN EN UN MANIFIESTO LOS "PELIGROS" DE LOS ALIMENTOS TRANSGÉNICOS - Más de 300 investigadores, ecologistas, agricultores y sindicatos piden a Zapatero que "reconsidere su apuesta transgénica"
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Más de 300 investigadores, ecologistas, agricultores y representantes de sindicatos presentaron hoy en Madrid un manifiesto para denunciar los "peligros" e "impactos" que, a su juicio, implica la introducción de los transgénicos "en el medio ambiente y en nuestros platos".
Se trata de la "Declaración de personalidades y organizaciones de la sociedad civil sobre las aplicaciones de la biotecnología en la modificación genética de plantas", que, bajo el lema "Democracia, precaución y medio ambiente", presentaron hoy en rueda de prensa Amigos de la Tierra, la organización agraria COAG, Ecologistas en Acción y Greenpeace, con la colaboración de Científicos por el Medio Ambiente e investigadores.
El documento cuenta con el apoyo de 301 representantes de la sociedad civil, incluyendo a investigadores, docentes universitarios, organizaciones profesionales agrarias, asociaciones ecologistas, de consumidores, de productores de agricultura ecológica, ONG de desarrollo y otras entidades privadas.
El manifiesto, presentado en el marco de un "desayuno ecológico" para periodistas, sale a la luz en un "momento clave" en el debate sobre los transgénicos, según dijo el responsable de la Campaña de Transgénicos de Greenpeace, Juan Felipe Carrasco.
Este experto se refirió a la prohibición del cultivo de maíz modificado genéticamente por parte del Gobierno francés, basándose en una serie de informes científicos que "alertan sobre las incertidumbres sanitarias" que implican. "Los españoles no quieren seguir comiendo transgénicos", dijo Carrasco.
Entre otras advertencias, los 300 firmantes de este manifiesto alertan de las consecuencias de los maíces transgénicos tipo Bt (entre ellos, el que se cultiva en España, el MON 810) en el medio ambiente y la salud, así como "la imposibilidad de evitar la contaminación a otros agricultores, la generación de resistencias en plagas y los efectos tóxicos sobre varios tipos de organismos presentes en los ecosistemas" y "la toxicidad a largo plazo sobre seres humanos".
Por este motivo, y al considerar que España "sigue siendo el principal productor de maíz transgénico", con más de 75.000 hectáreas cultivadas en 2007, la declaración aconseja al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que "tome nota de la abrumadora oposición social frente a su imposición en la agricultura y la alimentación", para que "reconsidere su apuesta transgénica".
ETIQUETADO
Además, denunciaron "la introducción de transgénicos en las cocinas españolas" por la falta de etiquetados adecuados en los alimentos.
La secretaria general de Amigos de la Tierra, Liliane Spendeler, criticó que en España sólo se informa del contenido de transgénicos superior al 0,9% en los alimentos, por lo que "todo lo que queda por debajo pasa desapercibido".
Por su parte, Andoni García, responsable de la Ejecutiva de COAG, insistió en que los organismos modificados genéticamente "sólo benefician a las grandes multinacionales", al tiempo que "destruyen los modelos de agricultura tradicional" y el medio rural.
Eugenio Reyes, investigador del Jardín Botánico de Gran Canaria, incidió en este aspecto, subrayando que los transgénicos "están erosionando la biodiversidad, llevando a la extinción a semillas y especies" y "dejando la puerta abierta a nuevas plagas y enfermedades". "Objetivamente, estamos hablando de incorporar tóxicos a los alimentos", advirtió.
"Estamos convirtiendo la biosfera en un auténtico laboratorio para probar tecnologías inmaduras", manifestó el presidente de Científicos por el Medio Ambiente, Jorge Riechmann.
(SERVIMEDIA)
16 Ene 2008
CAA