Grisolía señaló en San Lorenzo de El Escorial, en rueda de prensa en la sede de los Cursos de Verano de la Universidad Complutense, que, a su juicio, "la legislación vigente no es suficiente", aunque reconoció que "no es sólo un problema de endurecer las penas, sino que también hay que fomentar la prevención".

El científico dijo que no sólo ha remitido una carta a Zapatero, sino que también envió misivas similares al presidente de la Generalitat de Cataluña, Pasqual Maragall, y al presidente de la Xunta de Galicia, Emilio Pérez Touriño.

Confió en que este mensaje sea "una especie de grito" con el que se pueda llamar la atención de la sociedad sobre este tema, ya que "parece que llega el invierno y nos olvidamos de este problema".

CRÍMENES CONTRA LA HUMANIDAD

En su carta, Grisolía reclama al presidente del Gobierno que atienda a la copia del "Estudio sobre las medidas para evitar o minimizar los incendios forestales", elaborado por el Consell Valencià de la Cultura en colaboración con expertos en la lucha contra los incendios y en conservación del suelo y que adjunta en la misiva.

También reclama que los incendios provocados sean considerados "crímenes contra la humanidad" y que sus autores, sobre todo de los fuegos causados por "intereses comerciales", sean perseguidos penalmente con toda firmeza.

Por otro lado, propone la creación de un instituto en el que los científicos y expertos en la materia puedan reunirse para estudiar la situación actual y determinar cuáles son las medidas más adecuadas para cada caso.

Por último, subrayó que los incendios forestales tienen un doble efecto sobre el medio natural, ya que, por un lado, "los árboles son necesarios para atraer la lluvia", y por otro, "si no hay suficientes árboles no se puede atrapar el anhídrido carbónico", lo que repercute en el calentamiento del planeta.