EL CICLISTA JUANJO MÉNDEZ, EXULTANTE CON SU MEDALLA DE BRONCE EN LA PERSECUCIÓN EN PISTA
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El ciclista Juanjo Méndez, que tiene amputados la pierna y el brazo del lado izquierdo, logró hoy la medalla de bronce en la persecución en pista de los Juegos Paralímpicos de Pekín 2008, dentro de la categoría LC4, reservada a los discapacitados físicos más severos.
Con su habitual sentido del equilibrio en un ciclista que pedalea con la pierna derecha y sujeta el manillar con su mano diestra, Méndez se enfrentó por el tercer y cuarto puesto al alemán Erich Winkler en el Velódromo de Laoshan, cuyo graderío estaba lleno a rebosar con un público enfervorecido animando a los ciclistas.
Entre los numerosos espectadores del velódromo se encontraban el presidente de honor del Comité Olímpico Internacional (COI), Juan Antonio Samaranch, y del presidente del Comité Paralímpico Español, Miguel Carballeda.
Winkler empezó más explosivo que Méndez, pero el español empezó a dominar la prueba a partir de los 750 metros y fue ampliando paulatinamente su ventaja hasta el definitivo tercer kilómetro.
Al final, Méndez paró el crono en 4'14"984, en tanto que su rival invirtió 4'21"550 en completar las 12 vueltas al Velódromo de Laoshan.
Tras concluir la carrera, Méndez se mostró muy exultante y declaró a periodistas españoles desplazados en Pekín que se encontró "muy bien físicamente" y que este éxito le ha supuesto "un gran sacrificio", al tiempo que dedicó la medalla a su hija y al equipo ciclista español, del que dijo que es "una piña".
Méndez tuvo un accidente de moto a los 28 años y empezó a dedicarse al ciclismo después para adelgazar, pero con el paso de los años se ha labrado un palmarés en el que destacan dos medallas paralímpicas, seis mundiales y 15 en campeonatos de Europa.
(SERVIMEDIA)
01 Sep 2008
PAI